Región
La pequeña localidad rural de Fernvale suele ser una zona tranquila y apacible a 60 km de Brisbane. Con una gran cantidad de aire fresco, parques infantiles y mesas de picnic, los lugareños y los campistas disfrutan de la soledad lejos de las ajetreadas ciudades y la estresante vida laboral. Sin embargo, todos los domingos por la mañana las cosas cambian en Fernvale con el mercado rural de Fernvale, que rebosa paz. Los coches aparcan a más de un kilómetro de distancia de la escuela primaria local, mientras gentes de todo el estado acuden en un intento de comprar productos frescos, artesanía o desenterrar una rara antigüedad que ha estado encerrada durante años en un garaje.
El mercado rural de Fernvale ofrece una auténtica visión del mundo suburbano australiano. Antes incluso de cruzar las puertas, hay camiones que venden pollos vivos y a veces incluso cachorros. El mercado lleva funcionando desde 1988 y aún se respira en el ambiente su ambiente original. Como en la mayoría de los mercados rurales, hay numerosos puestos que venden productos locales frescos y deliciosas mermeladas caseras.
Al haber crecido considerablemente en tamaño y atraer a más y más visitantes cada semana, ahora hay un gran número de puestos de segunda mano donde los vendedores ofrecen de todo y de nada. El Mercado Rural de Fernvale es un verdadero lugar de tesoros y basura y, con sus vendedores y artículos cambiantes, siempre hay algo nuevo que descubrir.
Si eres un entusiasta del vintage y las antigüedades, te encantará Fernvale. Es famoso por sus piezas auténticas de alta calidad, pero prepárate para rebuscar un poco, ¡merece la pena! Los vendedores aquí venden de todo, desde libros y discos viejos hasta artículos antiguos y ornamentados para el hogar. Algunos de los productos expuestos requieren un poco de cuidado, pero por el precio al que se adquieren es un problema menor, aunque no insignificante. Los percheros antiguos y las mecedoras de posguerra son fáciles de encontrar. Busque en las cajas de artículos aparentemente aleatorios y desentierre un tesoro mágico. Los relojes de bolsillo artesanales de principios de siglo junto a la bisutería victoriana deslumbran y brillan a la luz del sol.
Cuando visite Fernvale Country Market, asegúrese de hacer una pausa y detenerse en uno de los increíbles cafés para disfrutar de unos refrescantes manjares. La comida se prepara con ingredientes frescos directamente del mercado, lo que le da un sabor delicioso y satisfactorio. Si quieres darle un poco de vida a tu jardín, no pierdas de vista el puesto de árboles frutales. Son conocidos por tener los mejores precios de la zona. Y por último, no te vayas de Fernvale sin probar la mundialmente famosa Old Fernvale Bakery. La gente viene de todas partes para probar sus galardonadas tartas; con más de 100 sabores para elegir, seguro que encuentras una que te encante. Créenos, un bocado y entenderás por qué es tan popular.
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