Dos veces al año, hasta 500 vendedores de antigüedades, artículos vintage y de segunda mano toman uno de los barrios más populares de París, el Marais, para celebrar un gran mercadillo: la Brocante de la Rue de Bretagne. Los vendedores van desde coleccionistas profesionales a vendedores particulares que han vaciado algunas de sus viejas pertenencias, creando un maravilloso y variado mercadillo de antigüedades para disfrute de toda la familia.
El Brocante de la Rue de Bretagne es uno de los mayores mercadillos de París, junto con el famoso Marché aux Puces de St Ouen Clignancourt y el Marché au Puces de la Porte de Vanves, y los visitantes habituales coincidirán en que la espera merece la pena. Sólo se celebra en primavera y otoño durante tres días, y en esos dos fines de semana la zona se convierte en un hervidero de gangas y búsqueda de tesoros. El ambiente es maravilloso, lleno de emoción, y todos los asistentes charlan entre sí. Parece tanto un acontecimiento social como un evento de antigüedades, lo que contribuye al encanto de todo el mercado.
Considerado por algunos un poco caro, el Brocante de la Rue de Bretagne ofrece en realidad artículos para todos los bolsillos. Con una gama tan amplia de artículos a la venta, seguro que hay algo para todo el mundo, ya sea un coleccionista serio o simplemente busque un objeto único e interesante para su hogar. Los puestos ofrecen cámaras antiguas, porcelana, latón, teléfonos antiguos, joyas vintage, obras de arte Art Déco, libros vintage, cristalería, bolsos de diseño vintage, lámparas Art Nouveau, ropa vintage, muebles modernos de mediados de siglo, decoración francesa para el hogar, diseño industrial, máquinas de escribir y mucho más. En el patio del Ayuntamiento hay una zona dedicada a los jóvenes emprendedores, donde los niños pueden vaciar sus cajas de juguetes y ganar unos euros.
La Brocante de la Rue de Bretagne, con sus maravillosos puestos de comida, es un mercado del que puede disfrutar toda la familia durante todo el día. No deje de visitar su página web para no perderse nada.
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