ARTifacts presume de ser el mayor y más espectacular mercado y museo de antigüedades de China, y no cabe duda de que este lugar hace honor a estas afirmaciones. Lo de grande es un poco exagerado, ya que su vasta colección ocupa 9.000 metros cuadrados repartidos en seis plantas y se puede pasar fácilmente un día recorriéndola. No es obligatorio ir de compras y se parece más a un museo que a una tienda de antigüedades, pero hay tantas piezas increíbles que es difícil irse con las manos vacías.
La especialidad de ARTifacts son los muebles antiguos chinos y los visitantes recorren la historia cultural de China mientras pasean por este emporio. Muchas de las tribus minoritarias de China están representadas a través de piezas de bordado, bolsos y ropa antigua expuesta. También hay miles de armarios antiguos chinos, tallas, mesas, sillas, camas, estatuas budistas, taoístas, animistas y otras de madera y piedra, retratos de antepasados y pinturas budistas / taoístas, antiguos santuarios y tronos, con muchos objetos que datan de la dinastía Ming. Esta lista no es ni mucho menos exhaustiva, pero es imposible enumerar todo lo que se puede encontrar aquí.
Es bastante fácil llegar a ARTifacts en taxi, ya que se encuentra a unos 20 km del centro de Shanghai. El trayecto puede durar una hora, dependiendo del tráfico de la ciudad, pero merece la pena. Es un paraíso tanto para los entusiastas de las antigüedades chinas como para los turistas; el conservador de ARTifacts habla un inglés excelente y parece que no hay nada que no sepa sobre los productos expuestos.
En ARTifacts hay piezas para todos los precios, así que no es necesario gastar mucho para salir con algo especial. De hecho, ARTifacts no da la impresión de que su prioridad sea vender y ganar dinero. Se centra mucho más en mostrar las extraordinarias antigüedades e impartir conocimientos y una sensación de asombro a todos los que la visitan.
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